Y es que son dos facciones diferentes para un mismo rostro, y cualquier cosa que digas sera siempre mi opuesto en una contraposiciòn que yo jamas quisiera definir, por que no puedo; Desde la mas grande admiración y el desconsuelo he plasmado lo que propiamente es mi existir. Un ser reacio y tosco a acoplarse a lo que no puedo y nunca podre.
Cuando en tus ojos veo el ser deshecho que soy yo, tus infortunios en tu búsqueda los he tratado de acoplar a mi mentira, mi eterna mentira, soy muy bueno para mentir, pero ante vos desfallezco y me revelo como soy, un opuesto impar que su camino habría de seguir, pero, temeroso se halla.
Considerar una incapacidad, por tanto, es imposible, pues me hallo en un dilema ególatra, narcisista y demás, pero anhelo una tranquilidad que supongo en tu continuo. Que afortu-infortunado soy al navegar de este lado pues espero, llegaríamos lejos, pues sonreír pudiéramos a un fin inefable. Solo, entre vagos sentidos me apaciguo y completo, el no poder ante todo " sentir " en un sentido extenso.
Gozo de sobremanera al incapacitarme, pues se, que aunque quisiera no voluntariamente lo hago; Es desde mi conducta donde bulle el fuero, interno, de sobrepasarme, y me hallo, como siempre sin un fin, un norte definido; Me canso y agoto, en un suplicio irrevocable, la marcha que no mengua, el existir contraindicado, y tu, también, solo, pareces expresarte con mas frescura; Navegas como otrora, y te pierdes borroso a mi visión, focalizarte no puedo, pues mi envergadura, No alcanza.

Andres Yarce Botero