La idea del blog

La idea de este espacio ha surgido como una iniciativa de un grupo de amigos que ha girado siempre alrededor de la literatura y afines. Poco se espera de éste en un sentido vanidoso. Sólo se tiene por objeto tener un espacio de integración entre los amigos, para que se conserve por buen tiempo y se comparta como se ha hecho ya por otros medios, textos que cada uno siempre ha gustado de elaborar. Sin embargo dadas las nuevas y versátiles posibilidades de una herramienta como esta, no están de más las críticas y opiniones variadas.

Los Amigos

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Manuel, Yarce, Sebas ( El Poe ), Juan Esteban ( Divertido R.I.P) Juan José ( Juancho )

martes, 13 de julio de 2010

- Nadie sabe lo que es levantarse a las 2 de la mañana como un relojito todos los días, no poder una noche dormir a cabalidad, pasarla entero, de largo, descansar...-, manifestaba para con su interior Jhon Smith, ( cualquiera se puede llamar así ), cuando intentaba reafirmar algo que muy propio le era, su incapacidad total de dominarse. Ya no se sentía, pues unos síntomas avanzados de parestesia habían comenzado a hacer mella en el y en las noches, a altísimas horas de la madrugada se levantaba bañado en sudor y sus ojos, los que sentía hundidos, una agonía era lo que reflejaban. Hacìa de todo para intentar ignorar esos fatídicos momentos que tanto lo atormentaban, incluso salìa a caminar por la urbanizacion para distraerse y bajar esos niveles de ansiedad; ya no era extraño ver a un viejo arropado caminando a oscuras y mirando hacia el piso dando rondas y aspirando grandes bocanadas de aire pues creia ahogarse, rascándose todo el cuerpo y, si a veces se fumaba un cigarrillo, simpaticamente, pues, como lo hacia a escondidas, ( de nadie lo hacia ), intentaba esconder el humo proveniente de cada una de las bocanadas. Todo se le había prohibido, todo para el era malo, no era lo mejor. Se aterrorizaba freneticamente cuando se presionaba, algunas veces, una parte del cuerpo y no la sentía, luego otra y lo mismo, por instantes su sensibilidad se trocaba, se desvanecía y lo engañaba; Era así con una y cada una de sus funciones sensoriales, se trastocaban y como si estas se hubieran puesto de acuerdo lo engañaban; Ya nunca nada podía aseverar, afirmar o validar pues su contacto directo, sensorial con la realidad se hallaba trocado por su incapacidad para hacerle a esta frente. Y como hacer que le creyeran ?, era su gran diatriba en cuestión, pues a un viejo terco y obstinado, oiganlo bien, nada se le debe creer..; El mismo no se cree, por que habriamos de hacerlo nosotros?, como sumergirse en lo que es la mentira ajena, algo que no es nuestro, yo mejor me quedo en esta cómoda orilla.
Los sueños de Jhon también estaban atacándolo inquisidoramente; soñaba real y casi plausibamente, creía estar en ellos y muchas veces cuando abría los ojos, en esa acción que llaman despertarse era totalmente incapaz de diferenciar su estado pues sumado a la autenticidad del sueño estaba la sinestesia que lo embargaba, muchas veces permanecía rígido creyendo que el sueño se prolongaba y saltaba como si fuera perseguido cuando caía en cuenta que estaba en este lado y su cara reflejaba enseguida pánico pues ya no tenia conciencia plena de lo que era, aquello en lo que se había convertido.
Jhon siempre había negado el mundo, su patria, realidad, constumbres, hábitos , familia, de todo un critico contradictor, un irreverente incansable, terco en su voluntad; Ahora era el mundo el que lo negaba a el, no le permitía sentir, aquello que engañosamente nos otorga la falsa consciencia del ser, del existir; Por que era la pregunta que hace rato se hacia y la respuesta había creído tenerla en la punta de la lengua, - Sera que acaso ya deje de existir, morí en un pasado y mi realidad latente en su agonía, lucha por mantenerse aun en un constante antes de su gran colapso..?-
Pero era apreciado, incluso tenia gracia el viejo Smith en sus periodos de engañosa lucidez, Vivía de la renta de un apartamento que había heredado y uno que otro negocio que no se le lograba esquivar. No debía mas preocuparse de nada solo de sobrepasar cada uno de esas crisis sensoriales que como obstáculos en la pista se le atravesaban; En sus tiempos de mocedad fue un ávido corredor, el atletismo su bandera y de esos recuerdo era de donde sacaba la referencia análoga a los obstáculos que representaban esos baches oscuros en su existencia.
Los pocos que en las madrugadas la calle andan pueden ver aun a Jhon Smith, cargando ese cuerpo pesado que de el ya no tiene consciencia, un ser que avanza y parece no hacerlo, un vítreo personaje empañado por su incapacidad.

Andres Yarce Botero

2 comentarios:

María Juliana Yepes Burgos dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
María Juliana Yepes Burgos dijo...

Puedo ver a John Smith...lo puedo ver en varias personas que conozco...puedo verlo en mi, a veces..."cualquiera podría llamarse así".